MI POBRE ANGELITO: LA PELÍCULA QUE TODOS RECORDAMOS EN ÉPOCA NAVIDEÑA

La época navideña nos hace entrar en un ambiente de alegría y otras veces de tristeza, los foquitos que adornan las casas, centros comerciales y parques, todo con motivo navideño con colores rojo, verde y campanitas doradas.

Además de la comida especial de la época también están las películas que nos hacen recordar muchos momentos de nuestra niñez.

Una de esas películas es "Mi Pobre Angelito" (Home Alone) El niño que fue olvidado en las vacaciones familiares porque fue castigado en la noche anterior al viaje.

Lo curioso de esta clásica película es que nunca nos cansamos de verla, muchos ya hemos perdido la cuenta de cuantas veces la hemos visto, porque cada año la contemplamos de dos a tres veces. 

Aunque ya nos sepamos las líneas de lo que dice Kevin o de los personajes de la película "Prohibida" que el tío Frank no le dejó ver, tiene algo que nunca nos cansaremos.

La pizza tamaño familiar solo de queso, una gran copa de helado o unos Macarrones con queso es lo que siempre nos abrirá el apetito al ver el filme.

Las canciones como: white christmas, Rockin around the christmas, Run run Rudolph, o el grito de Kevin después de ponerse loción para afeitar que nos saca una sonrisa. 

Harry y Marv los ladrones que tienen calculado el tiempo de las luces de las casas menos que un niño que se quedó solo en casa por accidente haría que ellos "Los bandidos mojados" crean que hay una gran fiesta navideña en la casa, en la que en realidad hay puros maniquíes, y vayan a la cárcel sin antes salir con la cabeza quemada, los pies lastimados, o con muchas plumas de gallina por el cuerpo. ¡Ah! Y unos buenos golpes por unos tarros de pinturas.

La creencia de Kevin que el vecino es un asesino por una leyenda infantil contada por su hermano mayor Buzz en la que lo hizo correr de la tienda sin pagar el cepillo dental (lo que todos recordamos y nunca supimos si era o no aprobado por la asociación médica dental) 

Los zapatos de duende muy divertidos (en la que de seguro nos pondríamos cuando nos invade el espíritu navideño) de la chica que le dice a Kevin que aún puede alcanzar a Santa Claus si se da prisa, y así lograr comunicarle su petición para que vuelva su familia, sin antes haber dejado en claro que sabe que no es el verdadero Papá Noel sino un mensajero.

La inolvidable visita al supermercado en la que la cajera le pregunta si está solo; y lo que nunca vimos como hizo Kevin para llevar todas los compras después de que se le rompieran las fundas en las que llevaba.

El divertido plan para proteger su casa, la amistad que logró con su vecino y el espíritu navideño de un niño que ama los árboles de navidad, en la que su familia logró regresar para esta fecha especial. Sin duda una de las mejores películas que se estrenó ya hace 27 años (1990) y la que disfrutamos ver porque es un clásico navideño.

Escrito por: Samantha Jijón Gagliardo

@SamiGagli


Artículo Publicado en Medio Digital Cultura Colectiva el 15 de Diciembre del 2017
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