Son muchos los videojuegos que demuestran grandes
historias, ya sean de ficción o muy pegadas a la realidad, con una visión
un poco futurista. Podríamos pensar que solo son videojuegos y
que cumplen su principal función, que es la de entretener, pero no
podemos negar que muchas cosas que hemos leído en libros o visto en el séptimo
arte, que en un principio parecían un poco locas, se hayan vuelto en cierta forma parte de la realidad. Es posible que muchas de esas ideas
que fueron proyectadas en películas, juegos etc. hayan sido la principal fuente inspiración para desarrollar otras
muy parecidas.
Aunque entendamos mucho o poco sobre la
inteligencia artificial, esta ya forma parte de nuestro diario vivir; la usan algunas compañías de los cuales algunos somos usuarios para ofrecer un optimo servicio, también se
encuentran en medios y plataformas digitales que visitamos todos los días, ayudando a crear o a controlar de manera más
efectiva ciertos contenidos, claro que la parte humana siempre se encuentra monitoreando para que todo funcione bien.
¿Y si vamos más allá? No pensando en servicios sino en una inteligencia artificial independiente, aquella que no necesite del ojo humano; es lo que podemos ver en el juego de acción y de aventura gráfica o interactivo Detroit: Become Human, que fue lanzado en mayo de 2018 para PlayStation 4. El juego muestra el desarrollo de la inteligencia artificial en máquinas que se ven como humanos, llamados androides.
Los creadores mencionaron que la idea del juego no era narrar otra historia sobre inteligencias artificiales, ellos querían hablar y plasmar el significado de ser humano y los sentimientos que nos generaría si nos ponernos en el lugar de un androide que descubre nuestro mundo al igual que sus propias emociones.
En el juego se muestra que los androides fueron creados para
“servir” a los seres humanos, para realizar las cosas pesadas o
actividades cotidianas que los humanos ya no quieren o no tienen tiempo
de hacer o para analizar detalles que como personas podemos pasar por alto.
A medida que el juego avanza, tomando cada decisión por el propio jugador, la “vida” del androide se ve en diferentes situaciones, algunas de ellas reflejando lo que actualmente algunos ya se han preguntado, como aquello que las máquinas reemplazaran la mano de obra humana, dando como resultado la falta de empleo, pues los androides no tienen necesidades básicas como comer, vestirse etc. por lo tanto no generan gastos. Si una familia compra un androide para su ayuda doméstica no tiene que pagar salario, lo compran en la tienda que los fabrica y si llegan a tener algún fallo en su sistema, no hay duda que tienen garantía para que todo marche como debe de ser.
A medida que el juego avanza, tomando cada decisión por el propio jugador, la “vida” del androide se ve en diferentes situaciones, algunas de ellas reflejando lo que actualmente algunos ya se han preguntado, como aquello que las máquinas reemplazaran la mano de obra humana, dando como resultado la falta de empleo, pues los androides no tienen necesidades básicas como comer, vestirse etc. por lo tanto no generan gastos. Si una familia compra un androide para su ayuda doméstica no tiene que pagar salario, lo compran en la tienda que los fabrica y si llegan a tener algún fallo en su sistema, no hay duda que tienen garantía para que todo marche como debe de ser.
Pero esta tecnología desarrollada por los propios
humanos en algún momento se vería peligrosa, ya que los androides se dan
cuenta que no son simplemente máquinas para servir, llegando a descubrir el libre albedrío y los sentimientos. ¿La inteligencia artificial puede lograr que los robots sientan empatía y amor? En Detroit: Become Human, esto es posible.
En el futuro existirán seres que no específicamente sean de carne y hueso, con su propia comunidad en la que también puedan elegir a su propio líder político para juntos enfrentar a los humanos y exigir libertad e igualdad
de derechos. Es un poco loco e irreal pensar que esto puede pasar en el futuro, pero
la tecnología que usamos todos los días también se vio de esta forma muchas
décadas atrás.
Sony anunció que las cifras vendidas hasta
mediados de diciembre de 2018 eran de 2 millones de copias, Detroit: Become
Human, ha sido el juego más exitoso de la desarrolladora Quantic Dream. La
experiencia que tiene el jugador con el juego es completamente empático, en la
que duras decisiones se presentan en tres diferentes escenarios, cada uno con
una historia que llegan a conectar con un mismo fin, la libertad.
¿Estamos preparados como seres humanos para vivir con este tipo de inteligencia artificial? Algunos videojuegos no solamente pueden entretener contando historias de ficción, sino también dar una mirada distinta de lo que podría convertirse en una realidad no muy lejana.
Escrito
por: Samantha Jijón Gagliardo.
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